D. FRANCISCO
¡Lo sabíamos, lo sabíamos y todos te esperábamos!
Tu presencia calma mi desasosiego. Gracias por aparecer. Me voy presto a trabajar con una sonrisa en mi corazón. ¡Hoy seguro que tendré un buen día!
También espero que lo tengáis TODOS VOSOTROS.
PD. Estoy tan emocionado, y me he puesto tan nervioso, que me iba sin afeitar……….
¡Pero, si hoy es sábado y no tengo “currelo”!, ¡huy Dios mío, como tengo la cabeza!......
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