Bien... el dueño de las gallinas se portó amabilisimanente con nosotros; pero tuvo una EQUIVOCACIÓN: vimos un huevo grandisimo, triple que los demás... nos regaló dicho huevo, a pesar de que sabíamos de antemano que iba a pasar. Lo aceptamos... y lo metimos en el bolsillo... y por querer fotografiar restos de
flores del
cementerio que ya las estamos echando en el
huerto del "quemadero"... el huevo explotó dentro del bolsillo... y no precisamente por calor. Ya tendremos
fotos de ello. SALUDOS.