Por fin puedo saludar... desde el mismismo infieno, bueno el jar. din de los engendros. Auque sea de la antepenultima visita a
EXTREMADURA con buena y entrañable compañia.
FELICES SUEÑOS.
Considero más valiente al que conquista sus deseos que al que conquista a sus enemigos, ya que la victoria más dura es la victoria sobre uno mismo.
Aristóteles