Están muy unidos, siempre están así. Son un cielo! Con Dios me acuesto y con Dios me levanto la Virgen María y el Espíritu Santo. Cuanto se quieren los gatos y siempre tuvieron como enemigo los perros pero hoy no sería extrañar ver un perro y un gato abrazándose como los de la foto, como cambian los tiempos y aunque antes se decía, ¡Aire, aire….. mi marido en la era y yo con un fraile!, pues hoy ni era ni fraile.