Para primos lejanos mejor nada y en realidad este no valía para la siega y si para tenerlo en casa junto a la tinaja y cantaros.
El de la siega tenía la boca a un lado así cuanto estaba a la sombra debajo de las gavillas o al lado de los haces no le entraba paja ni granos de trigo por la boca.
¡Jesús, Jesús.................. todo está estudiado hace mucho tiempo!. No es exactamente igual pero es hermano del que conocimos en tiempos. En la siega qué bien nos venía el barril para beber agua fresca y darnos fuerza en el manejo de la hoz para caminar ante la mirada de aquellas calores.