– ¿COMO NOS CONSOLIDAMOS SI ESOS AMORES SUBLIMES NO ESTUCIERAN AL MENOS EN LA FICCION?
–También está en los folletines, los boleros, es el gran tema de la gente. Otra cosa es que en todo eso parece que no existe otro amor que el de pareja, y hay muchos más: por la belleza, los amigos, la familia, el arte, la naturaleza. En la literatura es omnipresente. No hay tragedia en la que no aparezca el amor; es un ingrediente obligado, una locura transitoria. Decía Schopenhauer que es un engaño de la naturaleza...