NUEVE SIGLOS DESPUES DE SU MUERTE, el cuerpo de san Isidro Labrador, permanece incorrupto, con la piel pegada a sus huesos y el cuello flexible, en un estado de conservación "inusual", casi inexplicable por las condiciones en las que fue enterrado, una circunstancia que ha unido a ciencia y religión en un sentimiento común de estupefacción.
Con motivo del 400 aniversario de la canonización del santo, el cuerpo incorrupto de san Isidro se expone desde este sábado y hasta el 27 de...