O TODOS O NINGUNO
Había una vez una vieja muy mala que murió. La mujer solo había realizado en su vida una buena acción. Llegaron entonces los demonios y la echaron en el lago del fuego. Pero el ángel de la guarda, que estaba allí, quiso salvarla y le recordó a Dios esa buena acción: «Una vez arrancó de su huerto una cebolla y se la dio a un pobre». Y Dios le respondió: «Entonces toma esta cebolla y échala al lago, de forma que la mujer se pueda agarrar a ella. Si logras sacarla irá al paraíso,...