Anda que no, a mi me enseño a fumar con los celtas cortos, y tambien me contaba historias de un tocino que prefiero no contarla entera, ademas de la loba blanca, como me acuerdo del tio Valeriano, era uno de los mejores. qué no daría yo - como dice la canción - por ir de la mano de mi padre a ver al tio Valeriano y a la tía María y sentir el cariño que de ellos siempre recibía. Se nos hacía de noche y volviamos a la casa de Parral con la cabeza llena de historias del campo y con la ilusión de volver con ellos otro día. Qué no daría yo... PC. No es porque fuera mi padre, pero como vaquero, era único y eso sólo lo saben los que lo conociamos. ¡Cómo le gustaba contarme el cuento de las sopas esperrias, en las noches de invierno, sentaos al reo de la lumbre y a la luz del candil! Un beso PC Emotiva foto, Coguta, te felicito. Ya no hay vacas como esas, ni vaqueros como aquél. Es la poesía lo que nos hace ver las cosas de otra manera. Un saludo. PC Muchas felicidades para todos los mayores. Esta foto se la dedico a mi madre. Un saludo para todos.