Una pandilla en un bar. Se toman copas y se habla. Surge el tema del acordeón: que si no la tengo...; venga ve a por ella que cantemos un poco...; que la que hay es la pequeña y tiene teclas mal...; es igual...; bueno, a ver que sale. Y las manos de Tomás sacan notas maravillosas de cualquier acordeón. Así surgió, no es que estuviera preparado y no se avisara. ¡Como nos hubiera gustado que en aquel momento y en aquel lugar hubiera mujeres! ¿Verdad PC? Aunque en casa de Isabel se pudo bailar con algunas. Saludos

Anda Valdío, no seas cachondo, si la otra noche hubiese podido dar un salto y colocarme, como tú dices, en la cornisa Cantábrica, lo hubiera hecho. Hacía calor
aquí. Saludos Valdio.
Pisaera haber si tienes el colirio a mano para los picores de los ojos.
Y a vísperas que se venga para aquí hoy el día esta lluvioso y la temperatura muy agradable.
Saludos Forer@s
Tienes razón Visperas, Isabel nos acogió como lo que es una gran mujer estuvimos en su casa bailamos y hasta nos sacó algo para comer es cierto que es increíble.
Lo de Tomás y el sudor es otro cantar, en otra ocasión lo podríamos hacer a las 3 de la madrugá, así no sudaría tanto el joio.
PC me imagino que ya llegas a Madrid con las pilas cargadas, pero trabaja lo justo no te pases.
Realito cuéntanos algo de tu estancia en el pueblo, que aunque haya sido corta la habrás aprovechado.
Saludos...
¡ROJOSAX, coño, no te había leido! Claro que puedes hacer uso de la información que dí a María José. ¡Faltaría mas! Es posible que yo haya hecho un pacto con el Diablo, pero no mi retrato. En mi retrato está lo que pasa. Un abrazo.
Yo, es que... con el Vísperas y el Pisaeras, alucino en colores. El uno, se va al patio a echar un cigarro, porque hace un calor de la leche, allí donde se encuentre; el otro, se despide porque le pican los ojos. La madre que los trajo. Un abrazo. PC
Oye pisaera, voy a hechar un cigarro al patio, por que aquí hace un calor de la la leche. Enseguida vuelvo