Más vale comer grama y abrojo que traer capirote sobre el ojo Hay ADp, ya te vale hombre! Ya te haran lo mismo a tí!
Un cuento:
Un ratón de una despensa convidó a otro campesino que se viniese
con él a hartarse de buenas comidas; hízolo así, y estando ambos
comiendo entró el gato, y el ratón de casa, como sabía bien su guarida,
escondióse presto; el campesino tardó más, y se vio en peligro; el gato
le alcanzó un rasguño sobre el ojo, que fue menester ponerse un pegote.
Otra vez después le volvió a convidar, y él, escarmentado de la primera,...