Ya vemos... que ésto tampoco se hace igual. Por lo tanto, tampoco somos muy ortodoxos en los contenidos. SALUDOS. Aqui la cestita con las dos palomas (que no soltaron) y el bizcocho.
El sacerdote nos dijo que este año el bizcocho iría a los cuidadores de la Residencia Virgen de Guadalupe para que merienden y que el año que viene irá a la de San Rafael. Todos aplaudimos este acuerdo.