Engracia y Cogutina: Se os quiere. Cada rajita que le hacía a las acitunas, lo hacia con un cachino de corazón. Darse una jartá de mi corazón no es bueno, Cogutina, asina que despacino. Engracia, sabes lo que os quiero a todos. ¡Hay que ver la cantidad de cosas que me aguantas! Menos mal que me conoces. Si me lees, dale un abrazo a tu madre, a tu hija y, cómo no, a ese pedazo de hermano. Le dices, que me de un toque. Ya pasaré a verte por tu trabajo. Besos. PC