MEMBRIO: Hola ASUN...

Hola RUTA 66. Perdona que no te haya contestado antes.
Repasando me he dado cuenta que te dejé colgado. Agradezco tu participación y te animo a que sigas haciéndolo

Supongo que has acertado de lleno en todo lo que decías, pero no te sé confirmar si se trata de “hornos tejeros”. Sé que es un horno donde se cocían las tejas, pero desconozco quién es el actual dueño, o no recuerdo qué nombre tuvo de antaño. A la derecha también está el conocido “tejá del tío Maximino”, aunque no sale en la foto.
La última vez que estuve en el arroyo del gato cogí hierbabuena, se la echamos al gazpacho y me supo a gloria.
Esta zona de Parral me trae buenos recuerdos.

UN SALUDO

No se pero a ti hay que escribirte dos o tres veces pa que te des cuenta que te escriben.

Que yo sepa lo que tienes un poquino mal es el brazo y por la tupa que te distes el día de la cena, a lo mejor lo tienes peor, por eso te preguntaba que como estabas.

Mira que luego la Mercedes habla conmigo y no se que le voy a decir, ja ja.

Tas dao cuenta que el "carajo mosca" (Finfano) dice que un día de esto come en mi mesa, a ver si lo tengo invitao pa Nochebuena y no me he dao cuenta.

Yo con esto estoy mu "mosqueá" y preocupa porque pienso que puede ser de mi familia y con tamto aparato y fliiis como le estoy echando, me lo puedo cargar y fijaté tu.

Como decía Encina que eras "Francis Baleares" y tenías un consultorio, pues te pido algún consejo pa esto.

Tu si no puedes escribir mucho con dos otres cosinas tienes bastante. Un abrazo pa los dos. ASUN

Hola ASUN
Siento no haberte costestado y tenerte preocupada, pero si no digo ná es que estoy estupendamente.
Creo que lo del acordeón me vino muy bien. De alguna manera empecé la rehabilitación. Tampoco esforcé mucho el brazo en la zona dañada, que es el hombro derecho, por lo que todo fue como la seda, resultando una velada maravillosa.

Veo que el FINFANO, más que un “carajo mosca”, lo que te tiene a ti es “a carajo sacao”. No haces vida con él, has vuelto a casa revueltita. Has estao un par de día, por los madriles, tranquila, porque sabías que no lo tenías cerca, y ahora empiezas a oirle el zumbido en el cogote, y junto a la oreja, y te pones turulita.

Te tienes que hacer su amiga. Le invitas en Nochebuena y le pegas un hartón de comer, le das una pataterita prodigiosa, de esas que alimentan sólo con olerlas, ya verás como sale contento y vuelve pa Nochevieja, pero con otro talante.
Si no puedes con tu enemigo, áliate a él, que siempre del enemigo se aprende algo.

Un ABRAZO