MEMBRIO: Amigo olivares. Estoy leyendo a un alumno de los de...

Buenos dias amigos, por aqui el tiempo mas de lo mismo, y con un "poquinino" de frio. Siguiendo la lectura de los mensajes donde los quede anoche, varios foreros relatan como D. Ricardo, usaba las manos para otros fines menos productivos que no fuese el de las palizas. El que les escribe las provo con toda su crudeza, tan solo una vez, pero dificil de olvidar. En otra ocasion, estando jugando al deporte rey en el palacio, paso D. Ricardo direcion al bar de Machado, nos llamo a todos los que en ese momento estabamos jugando, todos a una fuimos corriendo, a su llamada, y señalando a su flamante R-6 verde aceituna nos aviso que si a su vuelta de la ronda encontraba o veia algun rasguño en el coche, nos cortaba uno a uno nuestro organo sexual, al escuchar con esa voz ronca dicha amenaza, todos los alli presentes decidimos seguir nuestro partido de futbol en el cerro. Eran otros tiempos, y otra disciplina. SAludos y buen dia para todos

Hola Falco, a vosotros el organo sexual, a nosotros, el pitar pues nos dijo que nos cortaba el pito. Aprovecho tu mensaje, para contar algo que mas de una vez me quede con ganas, (en una ocasion hablando con un forero, se quedo sorprendido con las cosas que le conte,).
Digo me he quedado con ganas, porque por aqui por el foro, se ha comentado mucho, que Don Ricardo era un buen maestro, pues a los de mi generacion, no se lo oi decir a ninguno, es más, cuando nos tocaba con él, deciamos, vamos a ver como esta hoy el cafre. Podria contar muchas historias tristes, de las palizas que este hombre daba a niños, pero contare una de las que más me dolio aunque ese dia no me toco a mi. Un dia sobre las tres menos diez, cuando cruce por la esquina de la farmacia, por un supuesto arrayon al famoso R-6 verde, le estaba pegando una paliza, no se si recuerdas amigo Falco, a Dorotea, una niña gordita que era de Salorino, que a los que estabamos alli, nos estaba dando una pena tremenda de como estaba tratando a la chiquita, y dichosos arrayones del R-6, a los pocos dias y en el mismo sitio, otro palizon a un niño que venia de zamores.
Años despues, estando de farra en Caceres varios jovenes que habiamos sido alumnos suyos, estuvimos con el en los naranjos, y despues de charlar un rato, uno de nosotros, (no recuerdo literalmente sus palabras) le dijo, yo antes era un niño, ahora soy fuerte y usted viejo, ¿que pensaria aquel hombre en aquel momento?
Todo esto, desde la tranquilidad, ni ha sido por quitarme ninguna espina, ni rencor, ni nada por el estilo, solo contar hechos que vivi, en mis años escolares. Que Dios lo tenga en la gloria. Saludos

Amigo olivares. Estoy leyendo a un alumno de los de los llamados de “clases normales” (las escuelas) Donde él se explayaba, era con los niños de las clases particulares. Banalizar sobre esto me parece penoso; como me lo parecería, banalizar sobre los campos de concentración. Yo no hablo mucho de este tema, porque algún elemento creerá que habló desde el rencor (miserable valor) No, en mi corazón sólo tiene cabida el amor. Pero, tengo memoria. No quiero, como decía Brecht, olvidar la historia para no tener que repetirla. Y en mi memoria, tengo pasajes difícilmente expresables. Estuve en aquel centro de tortura cinco años. Y, me gusta mucho escribir, pero sobre esto no soy capaz; me puede el sentimiento. Mi último paisaje, mi última paliza, hizo que saliese corriendo y me tirase por la ventana de la escuela. Me hubiese dado igual la altura que tuviese. Yo pediría, por respeto al dolor ajeno de muchos de aquellos niños, que sobre este tema se pasase suavemente. Te agradezco tu exposición. Sólo pido que no haya otro mundo, porque podría encontrármelo allí. Un saludo afectuoso. PC