Otra epopeya superada El Baleares, para el próximo curso, vamos a intentar aprobar, como ahora se le denomina en esferas de "alta alcurnia": los créditos de la matraca. Ya se cruzaron palabras, ya se hicieron planes, alguien pedía medidas, otro encargaba tres, hubo quien apuntó nombres de carpinteros. Dejemos pasar el tiempo, pero... no perdamos de vista y sobre todo de oido, que... vuelvan a sonar las matracas en Membrío.