Buenos días:
Ribero, quiero felicitarte por la graduación de tu hija; paradojas de la vida, al año que viene, Dios mediante, le toca al mío en Salamanca. El destino ha querido que nuestros hijos enfoquen su vida por el mismo camino y, en este sentido, espero que el "Juramento Hipocrático", que no es otra cosa que las buenas prácticas deontológicas, les sirva de acicate en su quehacer diario.
P. D: Hace muchos años que no te veo, pero aprecio que has cambiado poco.
Un abrazo
Ribero, quiero felicitarte por la graduación de tu hija; paradojas de la vida, al año que viene, Dios mediante, le toca al mío en Salamanca. El destino ha querido que nuestros hijos enfoquen su vida por el mismo camino y, en este sentido, espero que el "Juramento Hipocrático", que no es otra cosa que las buenas prácticas deontológicas, les sirva de acicate en su quehacer diario.
P. D: Hace muchos años que no te veo, pero aprecio que has cambiado poco.
Un abrazo