Querida ENCINA: después de años y años dándole vueltas a la noria mental. Preguntándome, como “casi” todo el mundo, el porqué, para qué y qué; el dónde, cómo y cuándo…etc., etc., lo más jodido de todo, es que las síntesis de mi razonamiento filosófico, se concreta en cuatro palabras: ¡Estoy hasta los cojones! Es de suponer que a estas horas no haya niños. Aunque, si los hubiera, o hubiese, no creo que se asustasen mucho. Un beso. PC