Vaya tiempo que tenemos de tormentas, en aquellos tiempos los labradores estaban en la era en plena faena cosechando, cuando aparecían nubarrones oscuros decían: Ya veras tú, ya veras tú………, como caiga una buena el agua lo joera to.
Nunca pasó esto eran muy quejillas, Dios aprieta pero no ahoga, es BUENO y nunca se lleva lo que no es suyo y más siendo de los pobres labradores, seguro que los tendrá en su GLORIA.
Nunca decís nada del campo, es que sois hijos de capitalistas o de la GRAN Ciudad, pues yo no, hijo de labrador y a mucha honra.
Nunca pasó esto eran muy quejillas, Dios aprieta pero no ahoga, es BUENO y nunca se lleva lo que no es suyo y más siendo de los pobres labradores, seguro que los tendrá en su GLORIA.
Nunca decís nada del campo, es que sois hijos de capitalistas o de la GRAN Ciudad, pues yo no, hijo de labrador y a mucha honra.