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MEMBRIO: Francisco (¿me deja tutearle?), mi corazón ha dado...

GRITOS AL SILENCIO

Tengo tanto por gritar, que me faltan palabras para hacerlo

Tal vez, poco a poco pueda ir soltando la maraña o la anude mas……. Quien sabe..

Odio los momentos en los que me siente solo

Ni siquiera las palabras me acompañan

La soledad me abruma y consume mi alegria

Siento frio

Cuanta soledad, cuanto frio en medio de este calor

El silencio del acordeón es la única nota musical que no se escucha

Siempre está presente a cada minuto del día aunque se esconda entre frases y discursos

Y siempre regresa al silencio…... a pesar de saber que sin silencio no hay música

Me consuela saber lo dichosa que ha de ser la Decima Musa de Membrio

Debo intentar aprender a callar

BUEN DIA MEMBRIO…MEMBRILLEROS
FELIZ DIA

Dn. Francisco, "NO LE DEJO" que se sienta abrumado por la soledad, porque eso es una falsa percepción: NADIE ESTÁ SOLO, y menos usted que es creyente, que SABE que Dios siempre le acompaña, le habla, le escucha, le cuida..

Mire a su alrededor, puede que no haya durante el día personas en su casa, como le ocurre a muchísimas otras personas, y a veces nos gustaría; otros días necesitamos la soledad, el silencio, el descanso... y tampoco lo tenemos.

Pero hay que ser REALISTA: los jóvenes tienen que salir a estudiar, trabajar, divertirse...

Las personas mayores con dificultad de movimiento, los enfermos... muchas veces tendremos que estar solos, pero no por eso TRISTES.

No sé si dispone del ordenador todo el día, pero entre estas teclas tiene un montón de amigos que le aprecian mucho y nos encanta comunicarnos con usted.

Luego, según las limitaciones de cada uno, se puede uno entretener con sus aficiones: leer, ver fotos, cuidar las plantas, ponerse "guap@", oir música... incluso hacer algo para los demas: una tartita, unos aperitivos... (esto es un ejemplo).

Todo esto se lo digo porque acabo de pasar esa experiencia: de repente me he visto en casa, sin poder trabajar practicamente en NADA, sentada en una silla, sin fuerzas... Me paré a pensar... y hasta me puse a escuchar música clásica... (Me sentí afortunada. Algo muy parecido a lo que ha escrito BODES hoy, o sea, que DEPENDE MUCHO DE UNO MISMO).

Y ahora me voy yo a "quejar" un poco: Le escribo y no me contesta... (claro que no sé si es por problemas en los dedos, falta de tiempo... Esperemos.)

De todas formas, en los momentos de "BAJÓN", como dice mi madrina, que tiene 80 añitos, los creyentes somos AFORTUNADOS, y tenemos que dar muchísimas gracias porque ÉL siempre está ahí, es EL AMIGO QUE NUNCA TE DEJA.

Feliz día y un abrazo.

Amapola, a veces…. no siempre, vivo en un mundo de silencio, aislamiento y soledad y tu respuesta me hizo recordar que una vez coincidí en la iglesia, con un par de sordomudos, estas personas que viven en un mundo de silencio total.

De repente un asistente del sacerdote, empezó a hablar con las manos, ellos emocionados cantaron con sus movimientos y percibí una comunicación especial con Dios, que habla más allá de las palabras y de los sonidos.

Por momentos temía que mis palabras y mis cantos profanaran esa comunicación tan singular, en otros momentos me sentía como intruso al no hablar el mismo idioma de signos, sonrisas y miradas.

Sin embargo mas allá de las limitaciones, mas allá de las palabras, mas allá de los silencios, había una comunicación especial del Dios del Silencio, del Dios del Amor, del Dios de la Comunicación.

Más allá de las palabras, LA PALABRA entraba en el corazón.

Gracias Amapola.. y Feliz Fin de Semana

Francisco (¿me deja tutearle?), mi corazón ha dado saltitos de alegría.
Estaba segura de que lo que te decía ya lo sabías, lo hice porque todos necesitamos a veces que nos lo recuerden.

Un abrazo.