Muchas gracias por su reconcimiento hacia nuestra labor (creo que además de ser la profesión de muchas personas Gerocultores, debería ser vocacional) siempre he pensado que en las pruebas de acceso del personal que trabaja en este tipo de Centros, además de demostrar sus conocimientos y aptitudes, deberíamos observar en cada uno de ellos una serie de principios éticos y morales que compatibilicen el desarrollo de su labor profesional con el trato agradable, humano, humilde, cercano, cariñoso etc y que en otro tipo de trabajos como por ejemplo en una fabrica y con una máquina no serían necesarios. Afortunadamente la gran mayoría son así, y somos sin darnos cuenta muy receptivos a encariñarnos facilmente con nuestros MAYORES, entre otras cosas por que compartimos Casa y formamos una familia con sentimientos positivos. Reitero nuestro agradecimiento pero realmente no tiene ningún mérito, es muy fácil ser buena gente, (en general y en todos los ámbitos de la vida) para ser malos no tenemos tiempo. L. G. P.