MEMBRIO: DON JUAN.- Al menos, uno; mas por si acaso los dos...

DON JUAN.- Al menos, uno; mas por si acaso los dos dirigen aquí sus huellas, el uno del otro en pos, tus dos mejores botellas prevénles.

BUTTARELLI.- Mas...

DON JUAN.-! Chito!... Adiós.

ESCENA III

BUTTARELLI.-! Santa Madona! De vuelta Mejía y Tenorio están, sin duda..., y recogerán los dos la palabra suelta.! Oh sí! Ese hombre tiene traza de saberlo a fondo. (Ruido dentro.) Pero ¿que es esto? (Se asoma a la puerta)! Anda!! El forastero está riñendo en la plaza!! Válgame Dios!! Que bullicio!! Cómo se le arremolina chusma..., y cómo la acoquina él sólo!...! Puf!! Que estropicio!! Cuál corren delante de él!...! No hay duda: están en Castilla los dos y anda ya Sevilla todo revuelta!! Miguel!

ESCENA IV

BUTTARELLI Y MIGUEL

MIGUEL.- ¿Che comanda?

BUTTARELLI.- Presto, aquí serví una tavola, amico; e del Lacryma più antico porta due bottiglie.

MIGUEL.- Sí signor padrone.

BUTTARELLI.- Micheletto, apparechia in carità lo più rico que si fà,! afrettati!

MIGUEL.- Già mi afretto, signore padrone. (Vase.)

ESCENA V

BUTTARELLI Y DON GONZALO

DON GONZALO.- Aquí es.! Patrón!

BUTTARELLI.- ¿Que se ofrece?

DON GONZALO.- Quiero hablar con el hostelero.

BUTTARELLI.- Con él habláis; decid, pues.

DON GONZALO.- ¿Sois vos?

BUTTARELLI.- Sí; mas despachad, que estoy depriesa.

DON GONZALO.- En tal caso, ved si es cabal y de paso esa dobla, y contestad.

BUTTARELLI.-! Oh, excelencia!

DON GONZALO.- ¿Conocéis a Don Juan Tenorio?

BUTTARELLI.- Si.

DON GONZALO.- ¿Y es cierto que tiene aquí hoy una cita?

BUTTARELLI.-! Oh! ¿Sereis vos el otro?

DON GONZALO.- ¿Quien?

BUTTARELLI.- Don Luis

DON GONZALO.- No; pero estar me interesa en su entrevista.

BUTTARELLI.- Esta mesa les preparo; si os servís en esotra colocaros, podréis presenciar las cena que les daré...! Oh! Será escena que espero ha de admiraros.

DON GONZALO.- Sí. Y los más viles también.

BUTTARELLI.-............