Nos veremos igualmente, amigo. Estaré por estos lares el tiempo que me dejen las obligaciones. Y, siempre que pueda, haré el esfuerzo por veros y, a ser posible, seguir comiendo, cantando y pasándolo bien. ¡Vaya correa que tiene el amigo Pisaera! Bueno, vosotros tampoco os quedáis cortos. Un abrazo. PC