MEMBRIO: RENUNCIO...

RENUNCIO

Renuncio a la idea de atarme a un sentimiento…

Es hora de controlar mis emociones…

Evitar ser afectado por alguien más…

Es hora de buscar la solución particular de mis problemas…

El diablo sigue jugando conmigo, le he dado demasiado tiempo para hacerlo, le he provisto de los juguetes para hacerlo…

¿Quién controla mi destino?...

¿Quién juega con los sentimientos de quien?...

¿Quién es capaz de buscar respuestas en el silencio?...

Renuncio ciegamente a la idea de entregarme a pasiones sin incluir latidos sinceros…

Es hora de abrir los ojos y cerrar el cierre del pantalón…

Es hora de recuperar los sueños rotos…

Es hora de empezar a soñar de nuevo, porque nunca se he es demasiado viejo para dejar de soñar…

La muerte es tan sólo el sueño más largo de la vida…

Cumplir propósitos, y hacerme de otros…

Es hora de entrar a mi segunda infancia retrasada por la adolescencia infame e infinita…

Renuncio a los complejos heredados de mi primer infancia…

Es hora de…

Renuncio a mi malestar

BUEN DIA MEMBRIO…MEMBRILLEROS
FELIZ FIN DE SEMANA…NOS VEMOS HASTA EL LUNES

P. D. Alguien sabe algo del Maestro y de Hili…si lo ven UN ABRAZO A LOS DOS

¡Qué cosas dice, Dn. Francisco! Parecen "cosas suyas" y son "cosas nuestras"...

"ES HORA DE CONTROLAR MIS EMOCIONES"

Creo que una tal Teresa de Cepeda le llamaba "La loca de la casa"...

Muchos más se han referido a eso:

Dijo hace décadas Kalil Jibran; "... somos como un velero en medio del mar, el timón es nuestra RAZÓN, y nuestras velas junto con el viento son la PASIÓN que nos impulsa. Si tenemos solamente timón por más que lo moviéramos estaríamos estancados en medio del mar, y si ... (ver texto completo)

Sr. Francisco le deseo un año lleno de ilusiones y que siga deleitándonos con sus escritos.
Un cosita yo creo que también es bueno, no siempre, dejarse llevar por las emociones y vivirlas intensamente ¿no le parece?. Es difícil equilibrar la parte de emociones, y de razón, para que la balanza no se decante para un lado o para el otro.
No somos perfectos, pero la locura emocional, en ocasiones, vivida intensamente, es un estado de verdadera felicidad.
Le mando un beso