Terminé mi intentona de organizar casi, lo etéreo. No puedo más que dejar mis saludos, tasio, para tí, para todos los foreros y, de forma especial para aquellos que casi leí sus mensajes antes de despertarme, los sentí "cabalgar" conmigo sobre un teclado mágico, con "anorexia" de horas y con la sensación de tomar el "sobre" (como escribe nuestro amigo M. M.), al menos con la convicción de tener solventado el 50 por ciento del deber cumplido. Debemos entender que la casuística que nos ampara no da para más. Me sorprendisteis tarde, a veces, por eso os recuerdo especialmente: pisaera, Leonardo. ¡Buenas noches!