HOLA A TODOS, espero que hayáis tenido un feliz fin de semana; cuánto me hubiere gustado que se alargara y no llegara mañana.
ADP. La costumbre de enterrar a los fallecidos en el interior o alrededores de las iglesias, que duró hasta el siglo XIX estaba generaliza y supongo que en nuestra Iglesia y Pueblo también se haría. Cuando se exhumaban los cadáveres se apartaban aquellos huesos más relevantes, entre los que están las calaveras; no me extrañaría que en esos exteriores de la iglesia, en su parte trasera, estuviese el osario del templo o algún antiguo cementerio. Pienso que de ahí le viene el nombre a la calle. Esto es lo que modestamente aporto en esta rueda de opinión que se ha abierto entorno a esta calle, aunque veo que también hay algunos comentarios que apuntan en el mismo sentido; atrás quedaron los miedos a lo que alude el amigo TASIO.
También he de deciros que en esa casa adosada a la iglesia, la de doble altura, donde recuerdo que llegó a vivír la tía Polonia (q. e. p. d), también llegó a ser mi casa con anterioridad, cuando yo era muy niño. Mi madre es la que conoce bien la historia; me cuenta que la foto para el libro de familia y el pasaporte que necesitó hacer mi padre, cuando arregló los papeles para irse a Holanda, en la que estamos mi padre, mi madre y yo, sentados en unas sillas y yo entre sus piernas; la hicieron en la calle porque en el zaguán de la casa no había profundidad suficiente para una foto tan sublime.
SALUDOS
ADP. La costumbre de enterrar a los fallecidos en el interior o alrededores de las iglesias, que duró hasta el siglo XIX estaba generaliza y supongo que en nuestra Iglesia y Pueblo también se haría. Cuando se exhumaban los cadáveres se apartaban aquellos huesos más relevantes, entre los que están las calaveras; no me extrañaría que en esos exteriores de la iglesia, en su parte trasera, estuviese el osario del templo o algún antiguo cementerio. Pienso que de ahí le viene el nombre a la calle. Esto es lo que modestamente aporto en esta rueda de opinión que se ha abierto entorno a esta calle, aunque veo que también hay algunos comentarios que apuntan en el mismo sentido; atrás quedaron los miedos a lo que alude el amigo TASIO.
También he de deciros que en esa casa adosada a la iglesia, la de doble altura, donde recuerdo que llegó a vivír la tía Polonia (q. e. p. d), también llegó a ser mi casa con anterioridad, cuando yo era muy niño. Mi madre es la que conoce bien la historia; me cuenta que la foto para el libro de familia y el pasaporte que necesitó hacer mi padre, cuando arregló los papeles para irse a Holanda, en la que estamos mi padre, mi madre y yo, sentados en unas sillas y yo entre sus piernas; la hicieron en la calle porque en el zaguán de la casa no había profundidad suficiente para una foto tan sublime.
SALUDOS