Buenos días membrilleros. Yo no necesito excusas para abrir la ventana y desearos feliz viernes. Por fin Viernes! Buen día VIRGO.
BUENOS DÍAS:
AENCINA, y compañía. Decía uno de mis maestros, que en toda catástrofe moral sólo quedan en pie las virtudes cínicas. Es evidente, que ese maestro debió- ya murió- ser un poeta; porque, a lo que se ve, maneja de forma extraordinaria el lenguaje figurado. No parece ser -como mejor que yo seguramente tú sabes, amiga mía- que, en el lenguaje de ordinario, lo cínico- salvo en la antigüedad, por lo de Diógenes- forme parte de la escala de valores de las virtudes. Por lo tanto, el maestro en cuestión, define extraordinariamente un estado, que puede ser individual o colectivo. Lo realmente curioso, que sabrás mejor que yo, es cuando del lenguaje ordinario hacemos lo figurado. Por ejemplo: habrás oído lo de “Discriminación positiva”. Tal concepto, en poesía sería la leche: antítesis, paradoja, etc. De ordinario, tú y muchos lectores me comprenderán, ¿Cómo puede ser la discriminación positiva? En poesía, por ejemplo se diría: La hermosa fealdad del insigne jorobado (Me refiero a Notre Dame) De ordinario, nadie define como hermoso algo horrible. ¿Estáis de acuerdo? Pues no continuo; ¿No lo estáis? Continúo. Saludos y buen fin de semana. El mío será un poco más largo por aquello del día de la Comunidad. PC
AENCINA, y compañía. Decía uno de mis maestros, que en toda catástrofe moral sólo quedan en pie las virtudes cínicas. Es evidente, que ese maestro debió- ya murió- ser un poeta; porque, a lo que se ve, maneja de forma extraordinaria el lenguaje figurado. No parece ser -como mejor que yo seguramente tú sabes, amiga mía- que, en el lenguaje de ordinario, lo cínico- salvo en la antigüedad, por lo de Diógenes- forme parte de la escala de valores de las virtudes. Por lo tanto, el maestro en cuestión, define extraordinariamente un estado, que puede ser individual o colectivo. Lo realmente curioso, que sabrás mejor que yo, es cuando del lenguaje ordinario hacemos lo figurado. Por ejemplo: habrás oído lo de “Discriminación positiva”. Tal concepto, en poesía sería la leche: antítesis, paradoja, etc. De ordinario, tú y muchos lectores me comprenderán, ¿Cómo puede ser la discriminación positiva? En poesía, por ejemplo se diría: La hermosa fealdad del insigne jorobado (Me refiero a Notre Dame) De ordinario, nadie define como hermoso algo horrible. ¿Estáis de acuerdo? Pues no continuo; ¿No lo estáis? Continúo. Saludos y buen fin de semana. El mío será un poco más largo por aquello del día de la Comunidad. PC