Excompañera, el ánima de Vísperas comienza a inquietarse, algarabía de cuatrocientas voces infantiles están a punto de inundar las dependencias de nuestro Centro. Casi empiezo a echarlos de menos, cierto es siento "mono" de mesas y sillas, peticiones, certificaciones, problemas... y unas cervecitas a las 14 horas. La verdad,
amiga AMAPOLA, que no se si este año podré disfrutar de los sucesivos pasos que, en diferentes grados de intensidad, intentamos acoplar la vacación al trabajo intensivo, o...
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