TRINCHERA, el seiscientos nos dio mucha libertad de movimiento, nos íbamos a -
Salorino por los
caminos y callejas, así recorríamos todos los
pueblos, el
coche en
verano se cogía unos super calentones, digo por
camino, claro el conductor carecía de carne, Dios siempre nos protege, que vamos hacer, lo pasado pasado esta............ saludos.