Rebaja tu factura AQUÍ

MEMBRIO: Leyenda extremeña...

Leyenda extremeña

La fuente de la Velasca

Hubo un rey cristiano que, en una incursión de sus tropas por estas tierras de Cabeza el Buey, cuando eran tierras de infieles1, hizo prisionera a una hermosa muchacha mora. Atraído por su belleza le perdonó la vida para hacerla su sierva. Ella, no obstante, jamás se avenía a obedecerle.
Una noche de invierno, aprovechando la oscuridad y la ausencia de su dueño, se decidió a escapar del castillo. Aterida de frío, vagó y vagó toda la noche. Al amanecer, unos labradores de La Serena vieron que sus mulas se espantaban cuando se acercaban a un pozo sin brocal. Acudieron, atraídos por la curiosidad, y descubrieron unos hermosos vestidos de mujer flotando en sus aguas.
Desde aquel día se repite la historia que asegura que se oye en las noches de San Juan un canto irresistible de mujer, que atrae la atención de los viandantes y los llama desde las ondas del pozo de la Velasca, que así se llama el pozo donde se cree que ella desapareció. Nadie, sin embargo, ha sobrevivido para contarlo. Y no es que perezcan por la crueldad de la princesa mora; son ellos mismos los que, atrapados y trastornados por la belleza de su figura, se ven impulsados a lanzarse a las aguas turbulentas.
Francisco LÓPEZ-ARZA MORENO