UN DÍA COMO HOY.
SAN JUAN MACÍAS.
Nació el 2 de marzo de 1585 en Ribera del Fresno, (Badajoz), España, y falleció el 16 de septiembre de 1645 en Lima (Perú). Religioso y santo dominico español que evangelizó el Perú desde 1620.
BIOGRAFÍA. Fueron sus padres Pedro de Arcas y Juana Sánchez, por lo que su nombre debió ser Juan de Arcas Sánchez. El cambio de nombre se debe fundamentalmente a que las tierras de pastoreo eran llamadas "las Macías" y a los pastorcitos "los Macías". Por eso es que se le conoce como Juan Macías o Juan Pastorcillo. Se sabe que quedó huérfano desde los cuatro años y medio y bajo el cuidado de un tío lo dedicó al pastoreo. Después de un tiempo conoció a un comerciante con el cual empezó a trabajar, en 1616 el mercader viajó a América y Juan con él. Llegó primero a Cartagena de Indias (Colombia) luego al Reino de Nueva Granada, pasando por Pasto y Quito (Ecuador), para llegar finalmente al Perú donde se quedaría hasta su muerte. Su primera acción al llegar a Lima fue indagar sobre la Orden de Predicadores, indicando que se proponía ingresar a ella para servir a Dios de acuerdo a la voz que escuchó a los 20 años que le ordenaba venir al Perú. Su extrema bondad lo hacía frecuentemente repartir lo poco que tenía entre los pobres, hacía labor social y apoyaba a la Orden de Predicadores como hermano lego en el convento de dominicos de Santa María Magdalena donde finalmente fue admitido y luego el 23 de enero de 1622 tomó los hábitos. Un año después hizo los votos definitivos el 25 de enero de 1623.
Era frecuente ver a los mendigos, los enfermos y los desamparados de toda Lima que acudían buscando consuelo. La clase alta, a quienes se les llamaba "pobres vergonzantes" tampoco era ajena a sus consejos, incluso el propio Virrey Toledo y la nobleza de Lima acudían a él. San Juan Macías cuidaba, incluso, de que los ricos caídos en desgracia económica no sean vistos para no causarles pena y dolor. San Juan Macías no distinguía entre las personas y ayudaba a todo aquel que necesitase un pan o una palabra.
Fue beatificado por el Papa Gregorio XVI, el 22 de octubre de 1837. El Papa Pablo VI lo canonizó el 28 de septiembre de 1975.
SAN JUAN MACÍAS.
Nació el 2 de marzo de 1585 en Ribera del Fresno, (Badajoz), España, y falleció el 16 de septiembre de 1645 en Lima (Perú). Religioso y santo dominico español que evangelizó el Perú desde 1620.
BIOGRAFÍA. Fueron sus padres Pedro de Arcas y Juana Sánchez, por lo que su nombre debió ser Juan de Arcas Sánchez. El cambio de nombre se debe fundamentalmente a que las tierras de pastoreo eran llamadas "las Macías" y a los pastorcitos "los Macías". Por eso es que se le conoce como Juan Macías o Juan Pastorcillo. Se sabe que quedó huérfano desde los cuatro años y medio y bajo el cuidado de un tío lo dedicó al pastoreo. Después de un tiempo conoció a un comerciante con el cual empezó a trabajar, en 1616 el mercader viajó a América y Juan con él. Llegó primero a Cartagena de Indias (Colombia) luego al Reino de Nueva Granada, pasando por Pasto y Quito (Ecuador), para llegar finalmente al Perú donde se quedaría hasta su muerte. Su primera acción al llegar a Lima fue indagar sobre la Orden de Predicadores, indicando que se proponía ingresar a ella para servir a Dios de acuerdo a la voz que escuchó a los 20 años que le ordenaba venir al Perú. Su extrema bondad lo hacía frecuentemente repartir lo poco que tenía entre los pobres, hacía labor social y apoyaba a la Orden de Predicadores como hermano lego en el convento de dominicos de Santa María Magdalena donde finalmente fue admitido y luego el 23 de enero de 1622 tomó los hábitos. Un año después hizo los votos definitivos el 25 de enero de 1623.
Era frecuente ver a los mendigos, los enfermos y los desamparados de toda Lima que acudían buscando consuelo. La clase alta, a quienes se les llamaba "pobres vergonzantes" tampoco era ajena a sus consejos, incluso el propio Virrey Toledo y la nobleza de Lima acudían a él. San Juan Macías cuidaba, incluso, de que los ricos caídos en desgracia económica no sean vistos para no causarles pena y dolor. San Juan Macías no distinguía entre las personas y ayudaba a todo aquel que necesitase un pan o una palabra.
Fue beatificado por el Papa Gregorio XVI, el 22 de octubre de 1837. El Papa Pablo VI lo canonizó el 28 de septiembre de 1975.