Amiga Marga V: este fue un Santo que tuvo poco predicamento en Membrío. Me acuerdo de aquella ola de devociones repentinas, que, al poco tiempo, levaron anclas rumbo a un viaje lleno de vicisitudes. ¡Tierra, a la vista! ¡Imponente y estremecedor espectáculo!... y los conductores “in crecendo”, por las calles, sonando los claxon, pitos, o bocinas. ¿Y las gentes?, heroicos habitantes, rendidos ante el estruendo de tan larga serpiente, con vítores y emociones exaltadas. ¡Y, ahora!: ¿Que ha sido de San Cristobal? ¿Dónde descansa la sublime imagen? ¿Será víctima, como todos los preeminentes hombres, de la repugnante envidia? Yo espero que aparezca pronto, para que, aquellos que estamos abandonados a la laxitud y la flaccidez, podamos volver a la realidad de los 80 céntimos el litro de gasolina.-Se lo pido, encarecidamente.
Aguantar estoicamente al erguido Santo Patrón de los Conductores, forma parte de la gesta, que no por inverosímil deja de ser importante; bien es verdad que tu padre, y, a su lado, el tío Agustín, velan de cerca por si acaso un ligero movimiento de indecisión termina en un lamentable episodio. Eran otros tiempos, y otras emociones...
El Renaul 8, azul. Creo que tenía uno igual Julio “cachero”, que e. p. d.
El de la bici. ¡Que voy a decir yo!
Un abrazo
Aguantar estoicamente al erguido Santo Patrón de los Conductores, forma parte de la gesta, que no por inverosímil deja de ser importante; bien es verdad que tu padre, y, a su lado, el tío Agustín, velan de cerca por si acaso un ligero movimiento de indecisión termina en un lamentable episodio. Eran otros tiempos, y otras emociones...
El Renaul 8, azul. Creo que tenía uno igual Julio “cachero”, que e. p. d.
El de la bici. ¡Que voy a decir yo!
Un abrazo