MEMBRIO: Hombre, tampoco hagas esas exageraciones, que el cuerpo...

Chacho, PISAERA, no se te escapa una.

Me dieron la consigna de que no tenía que distraerme; no podía saludar, ni reírme, ni hacer monigotas a la gente, y como niño bueno debía obedecer; por eso me concentré de la mejor forma posible en aquello que tenía a mi alcance, mirando fijamente en la mancha sin pelos que se le extendía a Pablo por la cabeza y que le llegaba casi hasta el cogote; todo ello con independencia de que el acto era de máxima trascendencia y la solemnidad del momento así lo requería.
….
Hasta aquí te he dicho la versión oficial del gobierno, que, como siempre ocurre, es muy distinta a la de los sindicatos….

Pisaera, no sé de qué te estaba hablando, ¡esta chinostra joía…!
……

¡Ah, sí, ya lo recuerdo! En confianza te digo, que en ese sublime momento me picaba el ombligo, aunque en la foto no se me note. No me puse tirantes, y para que los pantalones no se me cayesen, me “arreaté muh apretao” un cinturón ancho de doble hebilla, que hizo que la masa corporal de mi redondeada barriga se me fuese, en parte, al bajo vientre, y el resto se me colocase entre el pecho y la espalda, aflorándome en mi rostro ese aspecto “avinagrao y estreñío” que plasmó nuestra intrépida reportera BAE. Lo que se dice “un hombre asfixiao” por las circunstancias, pero siempre guardando las apariencias: con la cabeza bien alta, sacando pecho y escondiendo la barriga.

Ahora sí recuerdo por qué antes se me fue el santo al cielo; una cosa es que el gobierno diga que debemos apretarnos el cinturón sacando pecho, y otra muy distinta es que nos pongamos moraos, no de comer, sino del estrangulamiento.

Yo también te mando Saludines y besos para tu madre.

NO CAMBIES NUNCA

Baleares, hay que ver el buen humor que tienes, se nota que eres hijo de tu madre. Pero ahora te escribo para que limpies el correo, ya que todos los mensajes que últimamente te mando me los devuelven. Acabo de mandar uno e inmediatamente me lo ha devuelto. ¿Es que no te gustan mis correos y por eso me los devuelves? Aclara pronto esta situación. A pesar de todo ya sabes que cuentas con mi admiración. Abrazos.

Te agradezco que me hayas recordado que tengo que limpiar el correo. Cuando he llegado del pueblo lo abrí y tenía, “cienes y cienes” pendientes. Con el programa que tengo instalado tardo mucho en verlos, puesto que tengo que ir uno por uno sobre una lista que siempre se me pone a origen sin posibilidad de avanzar como quisiera, y en otro ordenador que tengo se me ha ido al carajo el Explorer. Un auténtico desastre. Pero te pido que no dejes de mandármelos. Haré todo lo posible por limpiarlo esta noche, aunque me tenga que beber una cafetera de café.
¡HILIIIIII, prepara la cafetera bien cargáááá!´

Mis cuñados me dijeron que probablemente vendríais a Madrid, supongo que ya habréis estado. Deseo que todo haya ido bien. Un abrazo para Violeta y otro para ti.

Hombre, tampoco hagas esas exageraciones, que el cuerpo te puede pasar factura y vamos entrando en una edad en la que hay que cuidar los excesos. Cuando pasen unos días, seguiré mandándotelos, mientras límpialo poco a poco, no vaya a ser que también se "descuajaringue" el cacharro y entonces se lía más gorda. Respecto a lo que hablamos con tus cuñados, las cosas están yendo bien. Abrazos para los dos.