Para mi mamá
El tiempo es un bien preciado que continuamente se nos está escapando de las manos; su paso es inexorable; pero lo peor de todo no es que pase, sino vivir dejándolo pasar, o dejar de vivir sin haberlo aprovechado.
A menudo dejamos pasar el tiempo, aunque siempre justifiquemos que nos falte; ¡pero cuánto nos engañamos, cuando, por falta de tiempo, no nos damos cuenta de lo que nos perdemos por no saberlo aprovechar con aquello que deseamos, que queremos, que amamos!
Si irremediablemente el tiempo ha de pasar, pues que pase; pero hagámoslo pasar de la forma más querida, de la forma más deseable; y que nunca se quede atrás aquella felicidad que pasó inadvertida, y que jamás volverá a pasar, porque cuando pasó no le dedicamos ni un instante.
Hoy tengo todo el tiempo del mundo para dedicártelo a ti, madre; y lo mismo quiero decir mañana; espero que el tiempo no me falte.
MAMÁ, hazme unas miguitas, que voy para allá, o una tortillita para almorzar. Te llamé y no te pillé en casa, pero ya te llegará el aviso por “el intrenéé”, que las migas o la tortilla me las he de tomar.
FELICIDADES A TODAS LAS MADRES
El tiempo es un bien preciado que continuamente se nos está escapando de las manos; su paso es inexorable; pero lo peor de todo no es que pase, sino vivir dejándolo pasar, o dejar de vivir sin haberlo aprovechado.
A menudo dejamos pasar el tiempo, aunque siempre justifiquemos que nos falte; ¡pero cuánto nos engañamos, cuando, por falta de tiempo, no nos damos cuenta de lo que nos perdemos por no saberlo aprovechar con aquello que deseamos, que queremos, que amamos!
Si irremediablemente el tiempo ha de pasar, pues que pase; pero hagámoslo pasar de la forma más querida, de la forma más deseable; y que nunca se quede atrás aquella felicidad que pasó inadvertida, y que jamás volverá a pasar, porque cuando pasó no le dedicamos ni un instante.
Hoy tengo todo el tiempo del mundo para dedicártelo a ti, madre; y lo mismo quiero decir mañana; espero que el tiempo no me falte.
MAMÁ, hazme unas miguitas, que voy para allá, o una tortillita para almorzar. Te llamé y no te pillé en casa, pero ya te llegará el aviso por “el intrenéé”, que las migas o la tortilla me las he de tomar.
FELICIDADES A TODAS LAS MADRES
BALEARES, te mando un besito; ahora me voy a darle un achuchon a mi madre, hasta luego.
BAE, que pases un feliz día con tus padres y toda la familia. Seguro que tu madre espera ese achuchón. Ya sabrás medir tus fuerzas para no quebrarle ninguna pieza, que las madres son muy delicadas; y asegurado queda cuando se lo das de corazón. De mi parte también le das un fuerte abrazo, con los brazos o con lo que te sobre de ese conazonazo.
Y de ti no me despido sin darte un besazo.
Y de ti no me despido sin darte un besazo.