Los fieles, alborotados
por el terrible suceso,
cercaron al niño airados,
preguntándole admirados:
- ¿Por qué, por qué has hecho eso?…
Y él contestaba, agresivo,
con voz de aquellas que llegan
de un alma justa a lo vivo:
-« ¡Porque sí; porque le pegan
sin haber ningún motivo!»
por el terrible suceso,
cercaron al niño airados,
preguntándole admirados:
- ¿Por qué, por qué has hecho eso?…
Y él contestaba, agresivo,
con voz de aquellas que llegan
de un alma justa a lo vivo:
-« ¡Porque sí; porque le pegan
sin haber ningún motivo!»