9-Un histérico avispero
es la plaza: gritos, voces
y estruendosos altavoces
que, en su loco desafuero,
nos dan sus fónicas coces.
La orquesta a bailar convoca
con coplas ya tan añejas
que las maduras parejas
danzan al ritmo que toca,
dando saltos tal coneja.
En jarras, vasos, botellas,
bebe sedienta la gente
y le animan el ambiente
cuatro aspirantes a estrellas
con su música estridente.
es la plaza: gritos, voces
y estruendosos altavoces
que, en su loco desafuero,
nos dan sus fónicas coces.
La orquesta a bailar convoca
con coplas ya tan añejas
que las maduras parejas
danzan al ritmo que toca,
dando saltos tal coneja.
En jarras, vasos, botellas,
bebe sedienta la gente
y le animan el ambiente
cuatro aspirantes a estrellas
con su música estridente.