EXTREMADURA DURA, PERO TAMBIÉN TERNURA.
LA CUEVA DE MALTRAVIESO.
Es una cueva situada en las afueras de la ciudad de Cáceres (Extremadura, España), concretamente en la Avenida de Cervantes, y curiosamente hoy integrada en el casco urbano de esta localidad cacereña. Fue ocupada por el hombre en distintos momentos de la Prehistoria. Se encuentra en el área caliza del sur de la capital cacereña, conocida popularmente como El Calerizo. Otras cuevas próximas son las de El Conejar y Santa Ana.
En 1951, en el antiguo “camino de Maltravieso” situado en el término municipal de Cáceres, se estaba realizando una explotación de caliza para la obtención de cal. Debido a una explosión de un barreno, apareció una entrada a una cavidad que se correspondía con una de las salas de la Cueva de Maltravieso. Los obreros penetraron a su interior y encontraron restos humanos asociados a cerámicas. Posteriormente se exhuman varios cráneos de Homo sapiens, uno de los cuales presentaba una trepanación. Estos descubrimientos alertaron a varias personalidades locales, como Orti Belmonte (director entonces del Museo Provincial), el Conde de San Miguel (académico de Historia), Eduardo y Francisco Hernández Pacheco y José Álvarez Sáenz de Buruaga, quien difundió la noticia en el Archivo Español de Arqueología. Una figura destacada es la de Carlos Callejo Serrano, quien se convirtió en cronista y estudioso de dicha cavidad en los primeros años desde su descubrimiento.
Provincia de Cáceres. En el Calerizo de Maltraviesa (Cáceres), situado en las afueras de la capital, debido a la explosión de un barreno el día 8 de agosto, se produjeron grietas en una pared, y el consiguiente derrumbamiento de tierras, que motivó el hallazgo de una cueva. En ella aparecieron tres esqueletos y trozos de tiestos, todo desordenado. Los restos humanos estaban debajo de grandes piedras. Parece que hay más cavernas. En el exterior se encuentran abundantes restos de cerámica. Por personas competentes se ha dado a los restos una clasificación prehistórica, que parece compaginar con la opinión de Mélida sobre estas cavernas del Calerizo de Cáceres, algunas de ellas paleolíticas.
LA CUEVA DE MALTRAVIESO.
Es una cueva situada en las afueras de la ciudad de Cáceres (Extremadura, España), concretamente en la Avenida de Cervantes, y curiosamente hoy integrada en el casco urbano de esta localidad cacereña. Fue ocupada por el hombre en distintos momentos de la Prehistoria. Se encuentra en el área caliza del sur de la capital cacereña, conocida popularmente como El Calerizo. Otras cuevas próximas son las de El Conejar y Santa Ana.
En 1951, en el antiguo “camino de Maltravieso” situado en el término municipal de Cáceres, se estaba realizando una explotación de caliza para la obtención de cal. Debido a una explosión de un barreno, apareció una entrada a una cavidad que se correspondía con una de las salas de la Cueva de Maltravieso. Los obreros penetraron a su interior y encontraron restos humanos asociados a cerámicas. Posteriormente se exhuman varios cráneos de Homo sapiens, uno de los cuales presentaba una trepanación. Estos descubrimientos alertaron a varias personalidades locales, como Orti Belmonte (director entonces del Museo Provincial), el Conde de San Miguel (académico de Historia), Eduardo y Francisco Hernández Pacheco y José Álvarez Sáenz de Buruaga, quien difundió la noticia en el Archivo Español de Arqueología. Una figura destacada es la de Carlos Callejo Serrano, quien se convirtió en cronista y estudioso de dicha cavidad en los primeros años desde su descubrimiento.
Provincia de Cáceres. En el Calerizo de Maltraviesa (Cáceres), situado en las afueras de la capital, debido a la explosión de un barreno el día 8 de agosto, se produjeron grietas en una pared, y el consiguiente derrumbamiento de tierras, que motivó el hallazgo de una cueva. En ella aparecieron tres esqueletos y trozos de tiestos, todo desordenado. Los restos humanos estaban debajo de grandes piedras. Parece que hay más cavernas. En el exterior se encuentran abundantes restos de cerámica. Por personas competentes se ha dado a los restos una clasificación prehistórica, que parece compaginar con la opinión de Mélida sobre estas cavernas del Calerizo de Cáceres, algunas de ellas paleolíticas.