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Buenos días amig@s.
Esta mañana es triste, no apetece decir nada, en mi pensamiento está Filo y su familia; además a amanecido lloviendo y hace el día mucho más triste todavía.
Besos Membriller@s, en especial para esta familia.
Esta mañana es triste, no apetece decir nada, en mi pensamiento está Filo y su familia; además a amanecido lloviendo y hace el día mucho más triste todavía.
Besos Membriller@s, en especial para esta familia.
Corazona, el día por aquí también está triste. Para ser más exactos, habría que decir que el día ayuda a que nosotros estemos tristes, también las circunstancias. Si llueve y llueve y no hace frío, puedes pasear y mojarte; te vendrá bien. Los piropos de Francisco, son estupendos. ¡Anímate! Así, por imperativo moral. Besos. PC
Sobre la EVIDENCIA.
Cuentan del estoico Esfero, que fue llamado un día a hacerse presente en la Corte del rey de Egipto, Ptolomeo. Quería éste, ironizar sobre la famosa "fantasía cataléptica" de los estoicos- la catalepsia es algo así como una especie de evidencia, algo sobre lo que no cabe duda-. Resulta que el tal Ptolomeo hizo traer y presentó ante el estoico algunas frutas, entre ellas una granada, la cual le ofreció. Esfero la cogió y la mordió. La granada era de cera. Entonces el rey le dijo: ¿Has visto?, tu fantasía cataléptica te ha engañado. Creiste que era y en realidad no era. A lo que Esfero le replicó: "Es que mi fantasía cataléptica se refería, no a la granada, sino a la creencia de que lo que su magestad dice siempre es verdad".
PD. Bueno, amigo. No quería irme -espero que ya definitivamente- sin contarte esa pequeña anécdota. Al escribir, en realidad, lo que uno busca es compatir. Un abrazo y mis mejores deseos para todos.
Cuentan del estoico Esfero, que fue llamado un día a hacerse presente en la Corte del rey de Egipto, Ptolomeo. Quería éste, ironizar sobre la famosa "fantasía cataléptica" de los estoicos- la catalepsia es algo así como una especie de evidencia, algo sobre lo que no cabe duda-. Resulta que el tal Ptolomeo hizo traer y presentó ante el estoico algunas frutas, entre ellas una granada, la cual le ofreció. Esfero la cogió y la mordió. La granada era de cera. Entonces el rey le dijo: ¿Has visto?, tu fantasía cataléptica te ha engañado. Creiste que era y en realidad no era. A lo que Esfero le replicó: "Es que mi fantasía cataléptica se refería, no a la granada, sino a la creencia de que lo que su magestad dice siempre es verdad".
PD. Bueno, amigo. No quería irme -espero que ya definitivamente- sin contarte esa pequeña anécdota. Al escribir, en realidad, lo que uno busca es compatir. Un abrazo y mis mejores deseos para todos.
