MEMBRIO: Te agradezco, cortochico, en la parte que me toca,...

Voy a aprovechar que he mentado a Juan Caballero para deciros que toda mi familia le esta enormemente agradecido porque en cierta ocasion cuando eramos muy jovenes alla por los doce o catorce años fueron a bañarse como casi siempre a una charca unos cuantos amigos entre ellos mi hemano y el citado Juan, pues bien se metiron en el agua y uno no era capaz de salir al parecer solo se le veia ya la mano, se fueron todos para el pueblo, corriendo la voz de que el corto mayor se habia ahogado, pero la suerte de esta familia que habla es que Juan se quedo en el charco se tiro al agua y saco a mi hermano casi ahogado mi madre cada vez que veia al que salvo a su hijo se le ponia la carne de gallina y yo con el transcurso de los años le sigo teniendo verdadera admiracion a la vez que agradecimiento a Juan, creo que es un acto que habia que enmarcar con letras de oro porque reune valentia y generosidad.
Juan no se si leeras el Foro si es asi Un abrazo muy fuerte desde el corazon y si no, alguien cercano a ti te lo trasladara seguro.

Te agradezco, cortochico, en la parte que me toca, la mención que haces del tal Juan Caballero, eso te honra, y más en estos tiempos- se lo haré llegar-. Por cierto, al margen amor familiar, creo que fue el jugador de Membrío con más clase que yo haya conocido. Del portero, Sandalio; aunque era más antiguo que los que habéis mencionado- Santi, era de más p’acá- Tomás, jugó un tiempo de portero, de central y últimamente, cuando lo fichó el sanvicenteño, de delantero centro- Era, lo que se llama ahora, un polivalente- No nos olvidemos del portero que se hace llamar en el foro, Halcón. Diego el andaluz, tenía mucha clase también, éste era ya de tu época. También recuerdo a Vale (El hombre escoba) Corrales y todos los demás. Gonzalo era también buen pelotero, pero algo mostrenco. Cómo olvidar al delgado y escurridizo Juanito Bodes- clase, clase- En cuento a mi primo Antonio Nevado…me acuerdo de verlo jugar por el realito; creo que el mejor defensa central que se podía ver: clase, estilo, colocación, potencia, malas pulgas controladas. En cuanto a mi primo Vicente Nevado y Domingo…no sé qué ejemplo poner; solían intimidar a los contrarios de forma evidente. Vicente, es que ha vivido y vive el fútbol de forma increíble- no sé si aún pega patadas- Después, como en todo, estaba la política ¡Vi jugar de defensa al bueno de Enrique Gilete! Buena gente, pero más malo para la pelota que la carne pescueco- que ya es decir (lo digo con todo el cariño del mundo y él lo sabe) No recuerdo haber visto jugar a Manolo “El madrileño”, aunque me suena- Démonos cuenta que en aquellos tiempos, todos los que venían de Madrid, sabían jugar al fútbol por imperativo legal. En cuanto a mí, me puso Sandalio una vez de reserva, salí, no sé qué hice que estuve por allí cansino unos minutos y me volvió a quitar. Allí me di cuenta que lo mío iba por otros derroteros. Jugué, como todos, en el alto la charca, a la entrada de las escuelas, etc., aquellos partidos arriba y abajo, los Barcelona-Madrid, etc., pero era de más pequeño y porque el balón era mío (Cuando echábamos a suerte- con los pies, te acordarás- me cogían el último) Nos quedábamos hasta las tantas con el objetivo de empatar, pero pachín, Pirri, Corrales y Cía., nos goleaban casi siempre. También recuerdo a Carlos Ramos, y más y más. Emocionante cuando se cambiaban en las escuelas para ir al campo ¡Qué tiempos! En fin, que me enrollo. Es bueno hablar también de este fútbol tas arraigado a nuestra cultura. Que me disculpen los no mentados, son muchos. Ah, también vi al bueno de Antolín; punto y aparte. Saludos. PC

Francisco Javier que buena narracion has hecho de lo courrido en aquella epoca, como vera el amigo pisaera se puede alternar los hechos mas relevantes acaecidos en el pueblo como es salvar la vida de una persona, con asuntos desenfadados como es el futbol. El agradecimiento es de toda mi familia hacia vosotros, si yo disfruto de hermano es gracias a la generosidad de Juan, que por cierto no hace mucho tiempo lo vi por Alcorcon me pare con el, estuvimos charlando y me dio una alegria inmensa, te puedes ... (ver texto completo)

APC, tus alusiones hacia mí, me obligan a felicitarte por el memorión que tienes. Yo que pensaba, que aquello de que yo jugaba de portero no lo recordaba mas que yo - solo jugué en esa demarcación en mi edad infantil-cadete, justo hasta que me di cuenta, de que coriendo detrás del balón me divertía mas- ahora vas tú y lo cascas. Lo cierto es que no recuerdo si era mal o buen portero, pero sí que, mi gran mérito, era el de enfrentarme casi siempre a delanteros que me doblaban en peso y estatura con lo que, te puedes imaginar la de guantazos que me llevaba.
Al hilo de aquella historia futbolera, se me ocurre contar una de tantas anecdotas. En cierta ocasión, jugaba el partido de cada tarde en la campa que había entre el huerto de Cabila y la carretera, (lugar donde falleció la madre de el Lute en una tienda de campaña) en el equipo contrario estaban los famosos "Pacuchis", de tal suerte, que el mas fuerte de ellos que parecía un tarzán, -creo que se llamaba Adolfo- me lanzó un penalti que, por supuesto, se lo paré, pero..., el dedo índice de mi mano derecha se quedó mirando "pal" lado opuesto al que miraba mi portería y durante bastantes dias, con un diámetro muy superior al normal, hasta el punto de que tube que aprender a escribir sujetando el bolígrafo con el dedo corazón.
Haciendo un símil con la diferencia de presupuesto de los clubs de ahora. En aquel caso la diferencia de presupuesto se daba en el “comdumio” de unos y otros. ¿Quién no recuerda cada tarde a aquella parejita de hermanos con medio pan en una mano y varias centenas de gramos de chocolate en la otra, ante el apetito y la anhelante mirada de los hijos de la pobreza?... Esta diferencia de presupuesto en el “condumio” quedaba reflejada también en el terreno de juego… y si no, que se lo pregunten a mi dedo, ja, ja ja.
En cuanto a toda esa retaila de futboleros mencionados, yo me quedo con las maravillas que hacia tu primo Calambú… para mí sin duda el mejor. SALUDOS. ... (ver texto completo)