MEMBRIO: Este montón de piedra no vale mucho para dar abriga...

Estos tórricos de piedras solían hacerlo los pastores por los campos mientras pastoreaban las ovejas, por los campos de Alcántara recuerdo que había muchos, en invierno servían de abrigo para el viento y el agua.
Saludos

Este montón de piedra no vale mucho para dar abriga porque es redondo y entra el aire por todos los sitios y se le enfría las manos y los pies al pastorcillo.

Antes eran muy laboriosos los hombres del campo, cogían las piedras y las amontonaban encima de los canchos y por cada piedra que quitaban de la tierra salía un manojo de hierba, en los montones de piedra vivían los lagartos, los conejos, hacía el nido la abubilla, y si era parecido a este hasta le servía a los pájaros para aposarse y cantar alegremente sin parar.