Bueno... este por lo menos es gracioso, pero el otro no me gusta, esos de poraí son muy larguirucho. Cuando vaya al
pueblo iré a ver si veo por allí alguno. Y yo no he visto nunca debajo de las encinas, son muy difícil de ver, yo los encuentro siempre entre las grietas de los canchos y con un palo ladeo las candilejas (hojas) a ver si hay alguno porque me dá miedo meter la mano. Los "nuestros" son mas morados, tienen un tacto sedoso y la naríz la tienen mas "Porrúa" ¡Menúda nariz tienen éstos, ámos!