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"CANARIAS NO SE VENDE, CANARIA SE DEFIENDE", o "Canarias entera contra las petroleras"_fueron algunas de las consignas entonadas durante la movilización. No en vano, el argumento esgrimido por las organizaciones convocantes y secundado por los manifestantes alerta sobre las consecuencias de las prospecciones en aguas isleñas. Rita López, portavoz de Ben Magec, resumió la oposición a las catas en que "acarrearán riesgos económicos, medioambientales y sociales".
"Se arriesga parte importante del sustento de la economía isleña como lo son la pesca o el turismo y además todo ello en beneficio de una multinacional", insistió López, antes de añadir que "es un modelo sucio e injusto que solo beneficia a una empresa, un modelo caducado y peligroso".
A ello se suma la defensa que hace el colectivo de la apuesta por un desarrollo energéticos sostenible basado en las renovables "aprovechando que Canarias está más que de sobra preparada para ello", dijo la portavoz ecologista. Y aprovechó para lanzar un recado a los responsables de la Administración pública canaria y que también estuvieron presentes en las marchas. "Es una movilización ciudadana y nos alegramos de que apoyen la causa, pero seguiremos defendiendo un modelo sostenible que va en contra de la apuesta del Coalición Canaria por el gas, así que no esperamos oportunismos", sentenció.
Caras conocidas como las de dirigentes del Ayuntamiento de Santa Cruz, el Cabildo y el Gobierno canario se mezclaron entre miles de vecinos, que fueron al fin y al cabo los que hicieron desaparecer el asfalto de la céntrica avenida capitalina. El presidente del Gobierno de Canarias, Paulino Rivero, eligió La Graciosa para manifestarse, mientras que el vicepresidente del Ejecutivo optó por mostrar su rechazo a los sondeos en Madrid.
"Se arriesga parte importante del sustento de la economía isleña como lo son la pesca o el turismo y además todo ello en beneficio de una multinacional", insistió López, antes de añadir que "es un modelo sucio e injusto que solo beneficia a una empresa, un modelo caducado y peligroso".
A ello se suma la defensa que hace el colectivo de la apuesta por un desarrollo energéticos sostenible basado en las renovables "aprovechando que Canarias está más que de sobra preparada para ello", dijo la portavoz ecologista. Y aprovechó para lanzar un recado a los responsables de la Administración pública canaria y que también estuvieron presentes en las marchas. "Es una movilización ciudadana y nos alegramos de que apoyen la causa, pero seguiremos defendiendo un modelo sostenible que va en contra de la apuesta del Coalición Canaria por el gas, así que no esperamos oportunismos", sentenció.
Caras conocidas como las de dirigentes del Ayuntamiento de Santa Cruz, el Cabildo y el Gobierno canario se mezclaron entre miles de vecinos, que fueron al fin y al cabo los que hicieron desaparecer el asfalto de la céntrica avenida capitalina. El presidente del Gobierno de Canarias, Paulino Rivero, eligió La Graciosa para manifestarse, mientras que el vicepresidente del Ejecutivo optó por mostrar su rechazo a los sondeos en Madrid.