Buenos días:
Lo bueno, o malo, que tiene este sistema es que quienes votan lo certifican. Se suele oír: “Tú los votaste” “No haberlos votado” etc., Pues sí, son reos de un delito los autores, los cómplices y los encubridores- o así era de más p’atrás- Se suele leer: “Yo tengo la conciencia tranquila, no voté al PP”, a contrario: “Yo tengo la conciencia tranquila, no voté al PSOE” Y así sucesivamente. Por tanto llegamos a la conclusión de que todo el mundo tiene la conciencia tranquila porque no votó al otro o, lo más probable, que la conciencia sea un concepto jurídico-ético indeterminado. Claro que, es posible que la conciencia salga del estómago. Es una cosa parecida al Fútbol: Estoy contento porque pierda el Barcelona, dicen los del Madrid; viceversa los del Barcelona. Quiere decirse que todos contentos…cuando pierden. Por todo ello, a vuela pluma, se puede entender que si votamos a un corrupto, certificamos la corrupción; si lo hacemos a un asesino, certificamos el asesinato; y si a una prostituta, certificamos el putiferio. Eso sí, en el derecho penal español existen las causas modificativas de la responsabilidad criminal: agravantes, atenuantes o eximentes. Por ello, respecto al voto, se puede aplicar la eximente, o en todo caso la atenuante, de “No lo sabía” “Me han engañado” “Le di mi confianza y la ha hecho añicos” o, la mejor de todas: “Yo no me muevo por ideas sino por intereses”. He ahí la cuestión, que dicen que dijo Chasquespeare… según Unamuno. Saludos. PC
Lo bueno, o malo, que tiene este sistema es que quienes votan lo certifican. Se suele oír: “Tú los votaste” “No haberlos votado” etc., Pues sí, son reos de un delito los autores, los cómplices y los encubridores- o así era de más p’atrás- Se suele leer: “Yo tengo la conciencia tranquila, no voté al PP”, a contrario: “Yo tengo la conciencia tranquila, no voté al PSOE” Y así sucesivamente. Por tanto llegamos a la conclusión de que todo el mundo tiene la conciencia tranquila porque no votó al otro o, lo más probable, que la conciencia sea un concepto jurídico-ético indeterminado. Claro que, es posible que la conciencia salga del estómago. Es una cosa parecida al Fútbol: Estoy contento porque pierda el Barcelona, dicen los del Madrid; viceversa los del Barcelona. Quiere decirse que todos contentos…cuando pierden. Por todo ello, a vuela pluma, se puede entender que si votamos a un corrupto, certificamos la corrupción; si lo hacemos a un asesino, certificamos el asesinato; y si a una prostituta, certificamos el putiferio. Eso sí, en el derecho penal español existen las causas modificativas de la responsabilidad criminal: agravantes, atenuantes o eximentes. Por ello, respecto al voto, se puede aplicar la eximente, o en todo caso la atenuante, de “No lo sabía” “Me han engañado” “Le di mi confianza y la ha hecho añicos” o, la mejor de todas: “Yo no me muevo por ideas sino por intereses”. He ahí la cuestión, que dicen que dijo Chasquespeare… según Unamuno. Saludos. PC