“UN PUEBLO QUE NUNCA SE ACABA” 43. II Parte
Apenas queda en el recuerdo aquellos testamentos en que se decía: “mando, que cuando la Voluntad de Nuestro Señor fuere servida llevarme de esta presente vida, mi cuerpo sea enterrado en la Iglesia Parroquial de Santa María de Gracia de éste en la sepultura donde están enterrados mis padres…”. Pero si las sepulturas más antiguas… ¡como sería el cementerio!, cuando por 1822 había sepultados 65 cadáveres, de los que había tan sólo 11 cadáveres de mayores…. y el resto de niños. Ahora según es Instituto de Estadística, que nos han fijado la edad media en 83,5 frente a la de 33 en pleno siglo XX, en algo hemos adelantado… a pesar de los insecticidas y últimamente de comer jamón.
Nos encontramos con Juan Medrano Magariño, el mayor vivo que había en el camposanto en el "Día de Todos los Santos" y que rompe la estadística; puesto que va camino de los 92 años - ¡ojala que cumple los 100 y más con nosotros!, señal que estaremos aquí. Hombre afable donde los haya, que no mira con desdén el pasado… todo lo contrario como un acumulo de recuerdos, de los que podemos aprender y saber muchas cosas. Nos vemos el año que viene. SALUDOS.
Apenas queda en el recuerdo aquellos testamentos en que se decía: “mando, que cuando la Voluntad de Nuestro Señor fuere servida llevarme de esta presente vida, mi cuerpo sea enterrado en la Iglesia Parroquial de Santa María de Gracia de éste en la sepultura donde están enterrados mis padres…”. Pero si las sepulturas más antiguas… ¡como sería el cementerio!, cuando por 1822 había sepultados 65 cadáveres, de los que había tan sólo 11 cadáveres de mayores…. y el resto de niños. Ahora según es Instituto de Estadística, que nos han fijado la edad media en 83,5 frente a la de 33 en pleno siglo XX, en algo hemos adelantado… a pesar de los insecticidas y últimamente de comer jamón.
Nos encontramos con Juan Medrano Magariño, el mayor vivo que había en el camposanto en el "Día de Todos los Santos" y que rompe la estadística; puesto que va camino de los 92 años - ¡ojala que cumple los 100 y más con nosotros!, señal que estaremos aquí. Hombre afable donde los haya, que no mira con desdén el pasado… todo lo contrario como un acumulo de recuerdos, de los que podemos aprender y saber muchas cosas. Nos vemos el año que viene. SALUDOS.