“UN PUEBLO QUE NUNCA SE ACABA: Recordando”. 05. Parte III.
Parece que nunca hemos padecido sequía y no es así. Parece que ya no es necesario formalizar una procesión y cantar aquello de: “Agua y agua Virgen Pura, agua Reina Singular / Agua espera de Ti el Cielo / que la necesita el pan / Los trigos van secando / y la hierba no ha nacido…” porque ya no se siembra; porque que ya “el hombre del tiempo” lo sabe todo. Bonita y enternecedora estampa cuando la procesión recorría las calles del pueblo, y en los “descansos” las mujeres de labradores le ponía una cuartilla de trigo o cebada en una silla delante de la Virgen. Otras veces por el “Chavarcón” (nos negamos con ponerlo con “b”), subía la procesión hasta “El Santo”. Había muchos incautos que sin paraguas subían… y algunas veces llovía.
En los pregónenos de la Guerra no era tan fácil, sacar a la Virgen en procesión por tal motivo. Si no abstengámonos al siguiente escrito: “ […] este Gobierno, no tiene inconveniente autorizar la celebración de dicho acto, siempre que para ello considerara no pueda ocurrir algún movimiento que causara alguna perturbación contra el orden público. Cáceres 19 de marzo de 1934. El Gobernador Civil”. Aunque algunas veces se oiga: “para beber tenemos”, es mejor que llueva aunque no siempre llueva a gusto de todos. SALUDOS.
Parece que nunca hemos padecido sequía y no es así. Parece que ya no es necesario formalizar una procesión y cantar aquello de: “Agua y agua Virgen Pura, agua Reina Singular / Agua espera de Ti el Cielo / que la necesita el pan / Los trigos van secando / y la hierba no ha nacido…” porque ya no se siembra; porque que ya “el hombre del tiempo” lo sabe todo. Bonita y enternecedora estampa cuando la procesión recorría las calles del pueblo, y en los “descansos” las mujeres de labradores le ponía una cuartilla de trigo o cebada en una silla delante de la Virgen. Otras veces por el “Chavarcón” (nos negamos con ponerlo con “b”), subía la procesión hasta “El Santo”. Había muchos incautos que sin paraguas subían… y algunas veces llovía.
En los pregónenos de la Guerra no era tan fácil, sacar a la Virgen en procesión por tal motivo. Si no abstengámonos al siguiente escrito: “ […] este Gobierno, no tiene inconveniente autorizar la celebración de dicho acto, siempre que para ello considerara no pueda ocurrir algún movimiento que causara alguna perturbación contra el orden público. Cáceres 19 de marzo de 1934. El Gobernador Civil”. Aunque algunas veces se oiga: “para beber tenemos”, es mejor que llueva aunque no siempre llueva a gusto de todos. SALUDOS.
