“UN PUEBLO QUE NUNCA SE OLVIDA: RECORDANDO. 26. III Parte-
Si lo leemos ahora… esto se acaba enseguida; ya que corresponde a mañana viernes día 15. Hay que leer antes otras cosas. Y ya sí que nos despedimos hasta la próxima semana.
Si había más carros que carretas en ello no vamos a entrar… y menos “tragar carros y carretas” sin querer. Era una frase bien avenida y servía para poner freno a las mentiras. Para frenos aquellos carros que para pararlos había quedar apresuradas vueltas aquel eje que terminaba en un mazacote de madera recubierto de goma de las que ponían los zapateros, ¡claro que chirriaban cuando por la velocidad o la carga no se podía parar el carro.. ¡Para el carro… se decía!, de ahí venía la consabida frase. Pero donde se subía todo “quisquiri mundi “era en las carretas, que con frecuencia transitaban por las calles del pueblo, bien cargadas… bien vacías. Cuando iba cargadas de aquellos sacos de tela o lienzo llenos de trigo... o lleno de paja o heno... daba igual; se subían los muchachos tanto del género masculino como femenino… hasta la comarcal que estaba en El Palacio, y que la regentaba el Sr. Galavis de Valencia de Alcántara; hombre por otra parte muy aficionado a las colmenas; no en vano todavía queda restos en las inmediaciones del “Puente Grande”; persona muy ordenada y “bien hecha” como podemos ver aún en su muro al que hacemos referencia con sus paredes pintadas de añil, calles escalonadas bien rematadas… en su tiempo, por supuesto. Membrío en la antigüedad fue muy dado a las colmenas, lo podemos ver y comprobar en los libros de diezmos. Pero todavía no hemos podido, ¡dónde c. estaba plantado el tal roble para que se llamase el “Puente Grande•, “Puente del Roble”… ¡, en cambio el fresno en el “Charco del Freno” si se puede ver o intuir, ¡no… lo del membrillo por supuesto en la “Venta del Membrillo” va a ser como mucho; queremos hasta saber ya de puesto: “lo que pasó en la callejina”; de la que todos hacemos referencia y jamás nadie la sabe situar. En cambio sí la “Callejina de los Pobres”, “La Callejina de los Novios”. Pero cuidado… los diminutivos en este pueblo no son tan diminutivos; sino como ejemplo sirva la frase que solemos decir: “Hay gentina…”, ¿Qué quiere decir, que hay mucha o hay poca? Pues “gentina” es lo que deseamos que haya en este Carnaval de 2016 y por “Las Candelas”, que ya se vaya viendo. CONTINUARÁ. Saludos.
Si lo leemos ahora… esto se acaba enseguida; ya que corresponde a mañana viernes día 15. Hay que leer antes otras cosas. Y ya sí que nos despedimos hasta la próxima semana.
Si había más carros que carretas en ello no vamos a entrar… y menos “tragar carros y carretas” sin querer. Era una frase bien avenida y servía para poner freno a las mentiras. Para frenos aquellos carros que para pararlos había quedar apresuradas vueltas aquel eje que terminaba en un mazacote de madera recubierto de goma de las que ponían los zapateros, ¡claro que chirriaban cuando por la velocidad o la carga no se podía parar el carro.. ¡Para el carro… se decía!, de ahí venía la consabida frase. Pero donde se subía todo “quisquiri mundi “era en las carretas, que con frecuencia transitaban por las calles del pueblo, bien cargadas… bien vacías. Cuando iba cargadas de aquellos sacos de tela o lienzo llenos de trigo... o lleno de paja o heno... daba igual; se subían los muchachos tanto del género masculino como femenino… hasta la comarcal que estaba en El Palacio, y que la regentaba el Sr. Galavis de Valencia de Alcántara; hombre por otra parte muy aficionado a las colmenas; no en vano todavía queda restos en las inmediaciones del “Puente Grande”; persona muy ordenada y “bien hecha” como podemos ver aún en su muro al que hacemos referencia con sus paredes pintadas de añil, calles escalonadas bien rematadas… en su tiempo, por supuesto. Membrío en la antigüedad fue muy dado a las colmenas, lo podemos ver y comprobar en los libros de diezmos. Pero todavía no hemos podido, ¡dónde c. estaba plantado el tal roble para que se llamase el “Puente Grande•, “Puente del Roble”… ¡, en cambio el fresno en el “Charco del Freno” si se puede ver o intuir, ¡no… lo del membrillo por supuesto en la “Venta del Membrillo” va a ser como mucho; queremos hasta saber ya de puesto: “lo que pasó en la callejina”; de la que todos hacemos referencia y jamás nadie la sabe situar. En cambio sí la “Callejina de los Pobres”, “La Callejina de los Novios”. Pero cuidado… los diminutivos en este pueblo no son tan diminutivos; sino como ejemplo sirva la frase que solemos decir: “Hay gentina…”, ¿Qué quiere decir, que hay mucha o hay poca? Pues “gentina” es lo que deseamos que haya en este Carnaval de 2016 y por “Las Candelas”, que ya se vaya viendo. CONTINUARÁ. Saludos.