Gracias a la organización por reeditar esta foto que me hizo mi amiga Marga. En el momento de tomar esta foto la emoción estaba a flor de piel, porque mi padre ya estaba con un deterioro cognitivo, era como un niño, me producía ternura bailar ese pasodoble con él pero tenía la posibilidad de abrazarlo, besarlo y achucharlo. Ahora cuando la miro me sigue produciendo la misma ternura, pero ahora no lo tengo para demostrale que le sigo amando, que tengo las mismas ganas de abrazarle, de besarle y de achucharle. Besos para todos.
¡Grande y querido Vicente! Me Recuerda a algunos de mi familia y otros membrilleros de antaño, no hacían ruido y casi ni hablaban por no molestar; cuanto de humildad y valores, nos haría bien aprender, tener nosotros más jóvenes y nuestras nuevas generaciones venideras. Saludos.