Agua que no has de beber déjala correr es un refrán que significa que cuando un asunto no es de la incumbencia del individuo, lo mejor no es involucrarse y dejar que el agua siga su curso natural. En este sentido, se puede decir que este refrán está relacionado con la intromisión en asuntos ajenos. Como tal, es un refrán popular, de origen español.
El refrán dicta un consejo o advertencia, de no involucrarse en asuntos ajenos para no generar molestias u obstruir dichos asuntos. De este modo, el refrán enseña en mantener al individuo al margen de un asunto que no le interesa o afecte, no es aconsejable entrometerse sino dejarlo pasar y a quienes verdaderamente le afecta pues dejar que sean ellos propios lo que busquen una solución al mismo.
En ocasiones, el individuo que se involucra en algo que no es de su incumbencia puede terminar involucrado en un gran problema, y generar molestias a las demás personas por meterse en algo que no le concierne o perjudique. Así, cuando se pone en práctica el refrán en estudio, estamos dando entender que si no es de tu problema o de competencia, es mejor dejarlo pasar.
El refrán dicta un consejo o advertencia, de no involucrarse en asuntos ajenos para no generar molestias u obstruir dichos asuntos. De este modo, el refrán enseña en mantener al individuo al margen de un asunto que no le interesa o afecte, no es aconsejable entrometerse sino dejarlo pasar y a quienes verdaderamente le afecta pues dejar que sean ellos propios lo que busquen una solución al mismo.
En ocasiones, el individuo que se involucra en algo que no es de su incumbencia puede terminar involucrado en un gran problema, y generar molestias a las demás personas por meterse en algo que no le concierne o perjudique. Así, cuando se pone en práctica el refrán en estudio, estamos dando entender que si no es de tu problema o de competencia, es mejor dejarlo pasar.