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CRONICA SOCIAL-. LA NAVIDAD INSOSTENIBLE.
El mayor deseo de la NAVIDAD es que nos devuelva la paz y nos llene de sentido común, este puede que lo tengamos encadenado a la verdad absoluta que ni existe ni es humana, que en tiempo navideño lo utilizaremos para hacernos mejores en vez de poseer objetos que no tienen corazón y los que sí que los tienen como las mascotas le decidimos hacernos de alguna sin meditación alguna de las consecuencias y responsabilidad que se contraen y una gran parte de sus adquisiciones no se la plantean, el convivir con una mascota es una decisión tan importante que nadie de tomar por uno mismo, cosa que no sucede lo habitual que debería de ser.
Hoy titulamos “la Navidad no se sostiene”, y así lo pensamos y lo vivimos, las pequeñas cosas de la cocina tradicional manual su preparación, hemos pasado el marrón levantando y marcando un número de teléfono que nos atiende amablemente con un “en que le podemos ayudar”, nos mordemos la lengua por no decirle al cocinero que es usted el que le ha quitado la salsa a la Navidad, donde ha quedado ese “prenda trajiste ese plato que se te da también, y tu ese postre buenísimo de los tres chocolates, aquel pescado de la cazuela, las otras costillas saladas con maíz y papas con aquel mojo con la receta de tu madre y anteriormente de su abuela, todo ese cariño lo hemos latizado (LAY) en unas bandejas de aluminio llenas de “putiferios” con nombres raros que no saben a comida del que nos vemos obligado decir a quien lo aporta lo rico que esta y lo bien que cocinan este establecimiento de comida para llevar, maldita sea el hambre que nos rodea, si ser sociables, persona de bien es tragar con estas agresiones culinarias nos negamos ocultar nuestros sentimientos, en nuestro derecho a nuestra defensa que no es menos cierto la noche buena la celebramos dos veces, el 23 el menú lo elegimos y el 24 tragamos lo que otros quisieron, esto de quedar bien con todos es otra complicación añadida, es lo que hay……tasio…..
El mayor deseo de la NAVIDAD es que nos devuelva la paz y nos llene de sentido común, este puede que lo tengamos encadenado a la verdad absoluta que ni existe ni es humana, que en tiempo navideño lo utilizaremos para hacernos mejores en vez de poseer objetos que no tienen corazón y los que sí que los tienen como las mascotas le decidimos hacernos de alguna sin meditación alguna de las consecuencias y responsabilidad que se contraen y una gran parte de sus adquisiciones no se la plantean, el convivir con una mascota es una decisión tan importante que nadie de tomar por uno mismo, cosa que no sucede lo habitual que debería de ser.
Hoy titulamos “la Navidad no se sostiene”, y así lo pensamos y lo vivimos, las pequeñas cosas de la cocina tradicional manual su preparación, hemos pasado el marrón levantando y marcando un número de teléfono que nos atiende amablemente con un “en que le podemos ayudar”, nos mordemos la lengua por no decirle al cocinero que es usted el que le ha quitado la salsa a la Navidad, donde ha quedado ese “prenda trajiste ese plato que se te da también, y tu ese postre buenísimo de los tres chocolates, aquel pescado de la cazuela, las otras costillas saladas con maíz y papas con aquel mojo con la receta de tu madre y anteriormente de su abuela, todo ese cariño lo hemos latizado (LAY) en unas bandejas de aluminio llenas de “putiferios” con nombres raros que no saben a comida del que nos vemos obligado decir a quien lo aporta lo rico que esta y lo bien que cocinan este establecimiento de comida para llevar, maldita sea el hambre que nos rodea, si ser sociables, persona de bien es tragar con estas agresiones culinarias nos negamos ocultar nuestros sentimientos, en nuestro derecho a nuestra defensa que no es menos cierto la noche buena la celebramos dos veces, el 23 el menú lo elegimos y el 24 tragamos lo que otros quisieron, esto de quedar bien con todos es otra complicación añadida, es lo que hay……tasio…..