MEMBRIO: Difícil saber dónde está el problema si pocos sacerdote...

“CONVERSANDO CONTIGO…..” 18. VII PARTE.

Hay tantos vestigios o restos de la actividad agropecuaria que hubo en este pueblo cuando paseamos por su campo, que algunas veces nos lamentamos de sus derruidos estados como si fueran de nosotros. Ahora cuando nos damos cuenta de su valor… cuando no tienen uso; son las cochineras o cochiqueras, “corralás” o zahurdas. Antes era muy normal que la gente se empleaba, sólo y exclusivamente para mover los cochinos, cerdos o cochos, de los que dicen que “hasta su andar se come”, de un lugar para otro; entonces decíamos que estaban en “montanera”. Al último que vimos en esta actividad fue al amigo Tomás cerca de la “Fuente del Candil”, la única que le hemos visto un pequeño cercado o huerto con su pared y cancilla, para su y cultivo en tiempos ya remotos. Ahí sembraba habas, coles, etc. el encargado, el tío Pablo Acuña Barrantes.

-A mí de todas las “corralás” que he visto por nuestros campos son la del “Maderito”. No sólo por su extraordinaria construcción… sino por su sistema de conjunto: había departamentos, lugares, habitaciones para todo… hasta un pozo con una coqueta buharda.

-Si… pero era de un solo señor o señores. Aquí en este pueblo de referencia había y hay dehesa boyal, y cualquier familia del pueblo podía hacerse una, cediéndole e Ayuntamiento el terreno. Hemos dicho ceder no dar.

- Fíjate… nosotros no tenemos dehesa boyal,

-Pero la hemos tenido.
- Entonces… porque ahora no la tenemos.

- ¡Bueno…. Ahora vienes con eso! Eso es otro tema para otra conversación; cuando quieras la hacemos: mañana mismo.

-“ ¡Piano, piano!”. Van a creer la gente que comentamos mucho del pueblo en lo antiguo… y nada de lo “moderno”, con lo que había que comentar. Nosotros de lo “moderno” no sabemos absolutamente nada. ¿Para qué…? Para que después se diga que damos mucho “jabón” a las dignas instituciones. A la gente en general le gusta la gresca y pare usted de contar. ¿Es que ya no hay gresca…? SALUDOS.

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La Historia de Membrio es muy rica y amplia y se tardaría mucho tiempo en saberlo todo.
¡Jesús, Jesús...................... moriremos "sin saber de la misa la mitad"!.

"No saber de la misa la media o no saber de misa la mitad".
Este conocido modismo podemos encontrarlo también en la forma ‘no saberse de la misa la mitad’ y sus orígenes se remontan al siglo XVI.
Por aquel entonces muchas eran las parroquias que atender (la mayoría muy distanciadas las unas de las otras) y muy pocos los sacerdotes disponibles para llegar a todas y oficiar la correspondiente misa.
Fue por ello que comenzó a echarse mano de los clérigos que, aunque estaban un escalafón por debajo de los sacerdotes o incluso sin ordenar, podían realizar tareas como la de celebrar una misa. Pero claro, eran tiempos en las que éstas se impartían en latín y no todos los diáconos tenían los suficientes conocimientos del idioma, por lo que solían aprendérsela de memoria y la recitaban de carrerilla.
Esto provocó infinidad de situaciones en las que por algún motivo podían ser interrumpidos, perdían el hilo o una mínima distracción les hacía quedar en blanco y no saber cómo continuar, lo que dio a que naciera la expresión ‘no se sabe de la misa la media’ en clara referencia a lo poco preparados que iban estos clérigos.
Como nota curiosa, cabe destacar que éstos también eran conocidos como ‘clérigos de misa y olla’, debido a que por su escasa preparación tan solo tenían facultades para oficiar la misa y comer.

Difícil saber dónde está el problema si pocos sacerdote o muchos pueblos e incluso algunos pequeños pero con una Iglesia bien grande.
¡Jesús, Jesús......................... ... clérigos de misa y olla!.